Diferencia entre abeja y avispa

Diferencia entre abeja y avispa

Sin duda para los apicultores y los amantes de los insectos las diferencias son notables pero a muchas personas les cuesta diferenciarlos. Vamos a ver algunos rasgos que te ayudarán a ser todo un experto.

Diferencias físicas entre abeja y avispa

Si bien es cierto que hay gran diversidad de especies, existen aspectos que delatan si se trata de uno u otro insecto. Las abejas son de color pardo y amarillo y tienen pelo. Por su parte las avispas suelen ser negras con franjas amarillas brillantes y apenas tienen pelo.

En el tamaño también hay diferencias. Las abejas suelen medir entre 15 y 20 mm y las avispas pueden llegar hasta los 35 mm dependiendo de la especie.

Método de defensa

Cuando oímos el zumbido de estos insectos a menudo nos sobresaltamos. No son animales agresivos y solo atacan cuando ven la necesidad de defenderse o cuando sienten la invasión de su espacio. Pero lo cierto es que unos son más agresivos que otros.

La mayoría de las personas saben que las abejas cuando pican con el aguijón se mueren. Esto se debe a que su aguijón es fijo, no pueden picar y recuperarlo, y al desprenderlo de su cuerpo dañan también sus intestinos ya que estos están enlazados a la glándula del veneno que está ligada al aguijón.

Por su parte las avispas tienen un aguijón retráctil y liso. Pican y recuperan el aguijón, no se desprenden de él.

El tipo de veneno también es diferente. En las abejas es ácido y en las avispas es alcalino. Esto influye a la hora de elegir la sustancia a utilizar para neutralizar el veneno. De tal forma que para neutralizar la picadura de una abeja que tiene veneno ácido se utilizan sustancias alcalinas.

Además las avispas son mucho más agresivas que las abejas y no suelen picar, ya que normalmente optan por morder.

Diferencias en su método de vida

Las abejas son insectos que siempre viven en sociedad, por su parte las avispas pueden ser más o menos sociales dependiendo de la especie. Las avispas forman sus enjambres con barro y las abejas utilizan cera para construir sus colmenas.

Una de las diferencias más notables e importantes es que solo las abejas melíferas tienen capacidad para hacer miel. Cualidad que no tienen las avispas.

Son las abejas, junto con los abejorros, los insectos responsables de la polinización de las plantas. Esta función es vital para la supervivencia del planeta tal y como lo conocemos, ya que sin la polinización gran parte de las especies, vegetales y animales, desaparecerían.

Por su parte la función de las avispas se limita a cazar otros insectos.

De lo anterior se deduce que su forma de alimentarse también es diferente. Mientras las avispas son omnívoras y están dotadas de potentes mandíbulas para alimentarse, las abejas se alimentan del néctar de las plantas.

En resumen, no solo se diferencian aparentemente sino que su forma de vida y su comportamiento social es completamente distinto. Ambos insectos ayudan a mantener el equilibrio en la naturaleza, si bien sus funciones son muy diferentes.